Celebremos el Día Internacional del Artesano
Herencia, creatividad y cultura: estos son algunos de los valores que se celebran en el Día Internacional del Artesano, donde se conmemora el trabajo de miles de personas que día a día logran crear piezas con sus propias manos, que transmiten las tradiciones y técnicas utilizadas por nuestros ancestros.
La artesanía constituye un rol primordial en la transmisión de la cultura, donde cada pieza creada representa los valores de la región de donde proviene, ya sea desde la región del Biobío, hasta Aysén, ninguna pieza es igual.
En la actualidad, a pesar de que muchas piezas ya no son utilizadas por su funcionalidad, son elementos decorativos que le dan un toque único a nuestros espacios, además de demostrar la conexión con nuestras raíces.

1. Tejidos creados con tradición
A través de Kuifi Kimün, grupo compuesto por tejedoras mapuches que utilizan el telar, observamos como el trabajo de estas comunidades no solo impactan en la preservación del patrimonio, sino que también ayuda a estas personas a generar ingresos adicionales que contribuyen al desarrollo económico de su zona.
Desde alfombras y pieceras, estas piezas se han hecho indispensables en nuestros hogares, por sus diseños que se adaptan a cualquier espacio.
2. Cestería que rescata las técnicas del mundo mapuche
Ñocha Malén, o “mujer de ñocha”, es una agrupación de mujeres que revaloriza el trabajo de la cestería, creando sus piezas a través de técnicas ancestrales del pueblo mapuche.
Sus creaciones van desde los canastos, maceteros, lámparas, y entre otros, demostrando la versatilidad que poseen los materiales que utilizan, junto con su capacidad de convertirse en protagonistas de los espacios de nuestros hogares.
3. Wancos que invitan a crear comunidad
Creados con solo una pieza, y con maderas rescatadas de los ríos y lagos. Esas son las características principales del wanco, un banco tradicional mapuche.
Vilcún Indómito es uno de los artesanos que crea estos bancos, los cuales por su composición sin respaldo, invita a la persona que lo utiliza a inclinarse hacia adelante y compartir con las personas que lo rodean.
Desde el Biobío, hasta la región de Aysén, los artesanos de Primeros Pueblos han logrado mantener la esencia de sus ancestros dentro de sus piezas, y al mismo tiempo, fusionarlas con el diseño contemporáneo, dando como resultado una obra que celebra el pasado y abraza el futuro con creatividad.